Comprar una plaza de parking en una comunidad de vecinos en Marbella puede parecer un trámite sencillo, se adquiere un espacio para estacionar el vehículo y listo. Sin embargo, en realidad, esta operación conlleva una serie de derechos y obligaciones legales que afectan a la comunidad de vecinos.
Administración de propiedades somos, especialistas en administración de propiedades en Marbella y Málaga, sabemos que muchos propietarios desconocen que al adquirir una plaza de garaje no solo compran un espacio delimitado, sino que también pasan a formar parte de la comunidad de propietarios, quedando sujetos a sus estatutos, normas internas y responsabilidades.
Y es aquí donde surge la gran pregunta: ¿qué derechos se tienen sobre las zonas comunes si solo eres propietario de una plaza de parking y no de una vivienda?
La Ley de Propiedad Horizontal y las plazas de garaje
La Ley de Propiedad Horizontal (LPH), aplicable en toda España, regula la convivencia en comunidades de vecinos. Según esta norma, incluso los propietarios de plazas de garaje forman parte de la copropiedad del edificio o complejo.
Esto implica dos cuestiones fundamentales:
Participación en los elementos comunes: aunque la cuota sea menor que la de un propietario de vivienda, sí se tiene un porcentaje de copropiedad sobre las zonas comunes.
Obligación de contribuir a los gastos: cada propietario debe abonar su parte proporcional de los gastos comunes, generalmente vinculados al mantenimiento del garaje (limpieza, luz, puertas automáticas, seguridad).
Ahora bien, el derecho de uso de las zonas comunes no siempre es automático. Este aspecto depende directamente de los estatutos de la comunidad.
¿Es tan importante tener en cuenta los Estatutos de la Comunidad?
Los estatutos son el reglamento interno que determina cómo se organizan y utilizan las instalaciones comunes de la urbanización. En ellos se establece, entre otros aspectos:
Qué zonas son comunes y cuáles son privativas.
Cómo se reparten los gastos de mantenimiento.
Quiénes tienen derecho a usar instalaciones como piscina, gimnasio o pistas deportivas.
En muchas comunidades de Marbella, los estatutos permiten que únicamente los propietarios de viviendas disfruten de las instalaciones de ocio, excluyendo a quienes solo poseen una plaza de garaje.
La razón suele ser doble:
Económica: las cuotas de garaje suelen cubrir solo el mantenimiento del parking, no de las zonas recreativas.
Práctica: en comunidades con un gran número de plazas, permitir acceso ilimitado podría saturar las instalaciones y afectar negativamente a la convivencia.
Uso de zonas comunes: qué debemos revisar antes de comprar
Si ya eres propietario o estás pensando en comprar una plaza de parking en Marbella, es esencial que revises los estatutos de la comunidad antes de asumir que tendrás acceso a todas las zonas comunes.
En Administración de propiedades recomendamos:
Solicitar una copia de los estatutos y del reglamento de régimen interno.
Localizar las cláusulas específicas sobre plazas de garaje y su vinculación con las zonas comunes.
Verificar si existen limitaciones de uso respecto a piscinas, gimnasios u otras instalaciones.
Consultar con un administrador de comunidades en Marbella para interpretar correctamente la normativa y evitar sorpresas.
Convertirse en propietario de una plaza de parking en una comunidad de vecinos en Marbella no solo significa disponer de un espacio donde aparcar, sino también formar parte de una comunidad con reglas, derechos y obligaciones.
En definitiva, contar con una administración profesional, te garantiza claridad en estos aspectos, evitando conflictos y asegurando una convivencia equilibrada.